Sancha impresor

Antonio Sancha es, sobre todo, conocido en el mundo del libro por su oficio de impresor. En 1770 (1771 según Indalecio Sancha, nieto de Antonio) compró el taller que había pertenecido a Gabriel Ramírez, situado en la plazuela de Barrionuevo, y en 1773 se instaló en la Aduana Vieja, en pleno centro de Madrid, ya que las dependencias de la aduana pública y comercial se habían trasladado a la calle Alcalá. El edificio de la Aduana Vieja era lo suficientemente espacioso para establecer la imprenta, la librería y el taller de encuadernación, aparte de los almacenes y su propia vivienda, según cuenta Matilde López Serrano. Además, esta imprenta contaba con siete prensas, que Sancha consiguió aumentar hasta dieciséis, y personal cualificado que continuó trabajando bajo las órdenes de Antonio Sancha.

   En los años que transcurrieron hasta su muerte en 1790 Sancha imprimió numerosas obras que alcanzaron las más altas cotas de calidad, tanto por su inmejorable papel como por sus generosos márgenes, la belleza de su tipografía y por el hecho de acompañarlas de las láminas de los mejores ilustradores del país.

Destacamos aquí obras como Arte nueva de escribir, ilustrada con la cuidada caligrafía del toledano Francisco Javier de Santiago Palomares o Historia de la milicia española, obra acompañada de bellos grabados.