Siglo XVI. Zaragoza. El taller de Jorge Coci
Zaragoza, como las anteriores ciudades, se encontraba en su momento de máximo esplendor y renovación urbana, fruto de la construcción de numerosos palacios renacentistas, que la dotaron de un aire más moderno.
En la capital aragonesa destacó el taller de Jorge Coci por encima de todos los demás, no solo por la cantidad de obras que de él salieron, sino también por su calidad. Coci era de origen alemán y trabajó en la imprenta también zaragozana de Pablo Hurus. Además, fue el único maestro impresor del reino de Aragón hasta 1528, y es bien conocido por ser el artífice de la primera edición del Amadís de Gaula en 1508.
En la Biblioteca de Castilla-La Mancha el trabajo de Jorge Coci está representado por impresos tan bellos como La Philosofia moral del Aristotel (1509), en el que puede admirarse la portada donde se representa a Alejandro Magno; Las Trescientas (1509), que contiene un grabado de su autor, el poeta español Juan de Mena, ofreciendo su obra al rey Juan II; De los remedios contra prospera y aduersa fortuna (1518), con una magnífica portada orlada a dos tintas, y Las quatorze decadas de Tito Liuio (1520), ilustrado con abundantes grabados en madera.
La imprenta de Jorge Coci acabó en manos de Bartolomé de Nájera y Pedro Bernuz, que trabajaron asociados publicando obras como Constitutionum synodalium omnium Archiepiscopatus Cesaugustani (1542), hasta que la sociedad se disolvió.